Resum:

Esta obra es un auténtico ejemplo de la praxis del diálogo intercultural de su autor. En ella se estudian las palabras más representativas de la tradición clásica de la India para señalar cómo en ella subiste una integración entre praxis, fe y razón frente a la articulación de la argumentación filosófica occidental, la cual, a pesar de su sofisticación, se mantiene escindida por los dualismos con los que dispone. El diálogo intercultural opera en esta obra no para descubrir en la India (o dejar de hacerlo) aquello que denominamos “filosofía” en función de nuestras propias categorías (ello supondría un trasunto de monopolio cultural, criticado abiertamente por el autor), sino para, en virtud de este diálogo, vivificar el sentido original de la filosofía en un renovado contexto. Este desarrollo descubre puntos básicos de relación entre ambos caminos, pero también descubre que la experiencia filosófica de la India puede descubrirnos un sendero de silencio y de nueva inocencia hasta ahora ajeno u olvidado en la tradición occidental.